Toca a mi puerta la vida, y la dejo pasar. Viene cargada de emociones de razones para cuidarla y conservarla.
Toca a mi puerta el amor y lo recibo, lo dejo ser. A veces es difícil contenerlo pero finalmente le convenzo que se quede.
Toca a mi puerta la salud y la dejo entrar. Hago lo que sea porque se hospede, pues sin ella lo demás no existe.
Toca a mi puerta la fortuna y permito su ingreso. No le pregunto como llegó, ni le cuestiono si se quedará.
Quizá otros personajes hallan llamado, no lo sé, no los recuerdo y al no sentirse bienvenidos tras una breve estancia se marcharon.
jueves, 6 de noviembre de 2008
Mi Puerta
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Los 5 más leidos de la semana
-
No me cabe la menor duda que el perfecto equilibrio del ser humano se logra a través del balance de lo que yo llamo El triángulo del Equilib...
-
A mediados del siglo pasado, Edward A. Murphy Jr, ingeniero de la fuerza aérea de los Estados Unidos, participando en el desarrollo de unos ...
-
Artista con el don del lenguaje sutil y la palabra rítmica, sin más compromiso que con su propio intelecto.
-
NO ESTÁS DEPRIMIDO ESTÁS DISTRAIDO . Distraído de la vida que te puebla, tienes corazón, cerebro alma y espíritu, entonces cómo puedes senti...
-
Quiero que me oigas, sin juzgarme. Quiero que opines, sin aconsejarme. Quiero que confíes en mi, sin exigirme. Quiero que me ayudes, sin in...
No hay comentarios:
Publicar un comentario